PRUSIA
Prusia se caracteriza por una pujanza tanto militar como económica de primer orden. Su industria es una de las más potentes y la base de su economía, hasta el punto de que muchos de los productos de primera necesidad deben ser importados. Las zonas urbanas son grandes complejos en los que permanentemente puede oírse el trabajo de los cientos y cientos de enormes máquinas que producen todo lo que la imponente industria del hierro alemán es capaz de producir, desde relojes de bolsillo hasta gigantescos astrobuques. La flota espacial prusiana es la segunda del mundo, sólo por debajo de la británica. En contraposición a esta floreciente vida urbana, las zonas rurales están algo atrasadas, utilizando técnicas que en otros lugares se considerarían anticuadas.
El Imperio Austro-Húngaro ha sido una de las grandes potencias en el panorama político internacional. A pesar de adolecer de una burocracia anquilosada y de la pérdida de su hegemonía en Europa Central desde la derrota frente a Prusia a mediados del siglo pasado, sigue poseyendo una capacidad militar envidiable y una potencia económica fuera de toda duda. Algo anclados en el pasado, su flota espacial no es tan importante como la de otras naciones, pero la Escuela de Astromarina de Viena es una de las mejor preparadas del mundo. A pesar del sistema de gobierno autoritario, su política se ha convertido en un intrincado juego de influencias, mentiras y promesas, en la que sólo los más avezados son capaces de moverse sin cometer un tropiezo que determine el final de su carrera.
LA CONFEDERACIÓN SUDAFRICANA
Formada por la República del Transvaal y el Estado Libre de Orange, la Confederación Sudafricana es una espinita clavada para el Imperio Británico, que en 1902 tuvo que firmar con los colonos neerlandeses el Tratado de Vereeniging, reconociendo su soberanía en un amplio territorio del sur de África. Su industria es limitada, y su flota espacial pequeña, pero la riqueza mineral de su territorio en la Tierra y el control de una de las pocas minas de cavorita conocidas en suelo terrestre convierten a esta nación en una pieza a tener muy en cuenta en el juego político internacional. La Confederación no controla apenas colonias, pero estas suelen destacarse por ser importantes centros de reabastecimiento y descanso para los astrobuques de otras naciones.
EL REINO DE ESPAÑA
A pesar de ser una de las primeras naciones en dar el salto al espacio, el mal gobierno y las disensiones internas en los últimos años han desgastado a esta antaño gran nación. En la mayor parte del Sistema Solar, el idioma local es el castellano, en muchas ocasiones por encima del propio esperanto, pero esto no impide que tanto las guerras carlistas como el choque con la Gran Colombia y Estados Unidos en el territorio americano y las colonias espaciales hayan golpeado duramente a la opinión pública, ocasionando un movimiento a gran escala en todos los estratos de la sociedad y una crisis en lo moral, lo social y lo político. El arcaico sistema político y económico de este país se está viendo cuestionado por las mejores mentes de la nación, y nadie sabe que rumbo tomará la misma en un futuro.
LOS ESTADOS UNIDOS DE AMÉRICA DEL NORTE
Después de perder la guerra contra México en el año 1848, los Estados Unidos vieron bloqueado su prometedor florecimiento al ser obligados a pagar cuantiosas reparaciones de guerra, la necesidad de mano de obra y el retraso en la industria han bloqueado hasta hace sólo un par de años la resolución de la contienda senatorial en favor de la abolición del esclavismo. Las zonas industriales del norte del país sufren una grave crisis económica, en contraposición con la riqueza del cinturón agrario del sur, sin embargo, se trata de un país en pleno despegue y que probablemente tenga mucho que decir en el futuro, ya que recientemente ha reclutado a algunos de los mejores científicos del mundo, algo que comienza a dar sus frutos. Sin embargo, y tras la abolición de la esclavitud, la tensión social y económica en los estados del sur presagia graves problemas.
LA REPÚBLICA DE FRANCIA
Liberté, Egalité, Fraternité. Francia es una de las naciones más avanzadas socialmente de todo el planeta, y su desarrollo tecnológico es muy elevado. A pesar de poseer un tejido industrial bastante fuerte, sus principales avances han sido en la pequeña ingeniería de autómatas y robótica. La sociedad francesa ha evolucionado a un mundo en el que el placer prima por encima de cualquier cosa, y es el país con más cabarets por habitante del mundo. Esto ha fomentado una gran actividad artística, y no hay joven en Francia que no quiera ser poeta, pintor, director de cine o simplemente crítico de arte. El nivel de desempleo es a su vez también muy alto, dado que las grandes fortunas amasadas durante los últimos años han dado lugar a una clase de nuevos ricos, para los que trabajar en algo es anatema.
LA REPÚBLICA DE LA GRAN COLOMBIA
Fundada en 1821, en el congreso de Cúcuta, la Gran Colombia representa el sueño bolivariano de una gran nación unida en Sudamérica. Desde luego, puede considerarse este conjunto nacional como una de las mayores fuerzas del continente americano, su capacidad industrial, gracias al apoyo de algunos poderes europeos, comienza a dar sus primeros pasos en el camino del acceso a la posición de potencia panamericana Por otro lado, el control de algunas de las estaciones mineras del cinturón de asteroides, que antaño pertenecieron al Reino de España, ofrece grandes posibilidades y un lugar seguro desde el que iniciar la conquista del espacio. Los roces con los Estados Unidos Mexicanos pueden acabar resultando en una guerra que arrase el continente americano.
EL IMPERIO JAPONÉS
Después de siglos de autarquía feudal, Japón tuvo que recorrer a etapas forzadas un progreso ajeno a su cultura, a menudo llegando a extraños compromisos. Pero en poco tiempo el Imperio del Sol Naciente se ha organizado, utilizando la tecnología occidental y desarrollando la propia, convirtiéndose en una potencia de primera. Sus conquistas territoriales y espaciales más recientes hacen del Japón un componente importante del estricto club de poderosos, aunque la república de Ezo sigue siendo una espina clavada en su costado, y la constante guerra con la misma provoca un auténtico despilfarro de recursos humanos y económicos. El apoyo de las potencias europeas a uno u otro bando podrían acabar por decidir la contienda.
LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS
Aunque fue a menudo el juguete de las potencias europeas, el México actual, victorioso contra Estados Unidos, representa la primera fuerza centroamericana, con una población activa y numerosa, aunque aún en desarrollo. Bajo su bandera se hallan millones de habitantes, tantos en la Tierra como en sus pocas colonias, que sin embargo empiezan a despuntar por su gran potencial de trabajo. Su política agresiva tanto en la Tierra como en el espacio es tan criticada como admirada en los círculos más exclusivos de los grupos de influencia mundiales. ¿Estamos ante el ascenso de una nación capaz de convertirse en árbitro de todo el territorio americano? ¿O se verá su prometedora carrera truncada por el conflicto con los otros dos gigantes americanos?
LA UNIÓN DE LOS PAÍSES BAJOS
Fuertes a través de una larga tradición mercantil y marinera, a los dirigentes de los Países Bajos les importa bien poco mantener el eterno cliché de comerciantes y mercachifles de poca honradez siempre y cuando eso sirva para conservar su potencia naval y comercial casi intacta. Las ilimitadas fronteras espaciales son una presa demasiado apetitosa para dejarla en manos de sus rivales. Con su proverbial eficacia, organización y limpieza, persiguen objetivos claros aunque más limitados que otros, apoyados por potentes gildas mercantiles, acuerdos y alianzas a menudo secretas. Se dice que ninguna moneda cambia de manos sin que algún neerlandés gane con ello, y en cierto modo es cierto, las extensiones de sus intereses pueden encontrarse prácticamente en cualquier transacción económica.
EL ESTADO DE LA CIUDAD DEL VATICANO
A pesar de su tamaño, el Vaticano encierra tanto a un enorme poder espiritual sobre todos los católicos, como una influencia sin par sobre lo mundano. Desde los pasillos del Castel Sant’Angelo, las hermosas capillas y los oscuros despachos debajo del suelo de Roma, se forjan alianzas, se lanzan anatemas y se planifican los movimientos de las naciones, de los banqueros y los pastores de almas, cuyos objetivos, ni tan siquiera el Papa conoce por completo. Cualquiera que ponga en duda la capacidad de presión de los diplomáticos vestidos de oscuro se arriesga a ver como sus inversiones fracasan, sus amistades le dan la espalda, y sus aliados comienzan a convertirse poco a poco en enemigos acérrimos. Porque la fe mueve montañas.
EL IMPERIO BRITÁNICO
La mayor potencia naval, militar, comercial y política de la Tierra representa todo lo que una nación puede lograr con el trabajo, el dinero y muy pocos escrúpulos. Con la Reina Victoria reinando, y su hijo Eduardo gobernando de facto, el país se encuentra en la cúspide de su poderío. Su flota astronaval es la mayor y más poderosa, pudiendo contener con su sola presencia a las demás potencias. Su extensión colonial es inmensa, abarcando una decena de planetas con sus lunas. Su influencia en el panorama internacional no tiene parangón. Sin embargo, el Imperio también está empezando a sentir los efectos de los nuevos tiempos, el mundo se convulsiona al sentir vientos de cambio y la Reina y el Regente saben que las cosas están cambiando.
LA REPÚBLICA DE EZO
Establecida en 1868 por los últimos resistentes afines al shogunato Tokugawa en la isla de Hokkaido, al norte de Japón, la fundación de la República de Ezo marca el fin de la Guerra Boshin y el inicio de una contienda mucho más enquistada y cruel. Dirigida por el sosai (o presidente) Enomoto Takeaki, se ha convertido en una nación perfectamente preparada para sobrevivir, con la lealtad entre sus ciudadanos establecida férreamente mediante una sociedad basada en la guerra librada contra el imperio japonés. Su sistema de gobierno es democrático, similar al de los Estados Unidos de América del Norte, y con grandes poderes para el presidente, pero la situación de guerra no ha permitido que se celebraran elecciones más que en dos ocasiones. El cómo se ha conseguido conjugar de forma tan perfecta la democracia con la tradición samurai es algo que todavía asombra a los analistas políticos.
EL ZARATO DE RUSIA
Mantenido durante siglos bajo un opresivo sistema feudal de servidumbre agrícola, a pesar de los esfuerzos reformadores de personajes como Pedro o Catalina, el Zarato es en potencia una fuerza considerable, de la que se espera que haga grandes cosas y ayude a equilibrar la balanza. Sin embargo su aparato burocrático ahoga cada día a inmensas masas campesinas que son a la vez su mayor activo y su principal problema. La ingeniería y la ciencia no carece de ideas novedosas, pero si de una infraestructura capaz de evitar que estas mueran antes incluso de nacer. Con una flota en desarrollo y colonias aún vacías, el Zar se pregunta si llegará a hacer de Rusia una potencia antes de que todo se precipite al abismo.
LA SERENÍSIMA REPÚBLICA ITALIANA
Un estado de nuevo cuño, a pesar de su historia, creado con la fuerza de las armas y el poder del dinero veneciano. La República Marinara construyó a Italia desde sus cimientos, pero también a su antojo, destruyendo el poder de los Saboya primero y reduciendo a las mínimas el del Papa después. Ahora, aumentada su fuerza a través de una flota en expansión, de numerosas colonias fértiles y de una buena remesa financiera, intenta abrirse paso a empujones en el lugar que considera adecuado entre las grandes naciones. El legado de Leonardo da Vinci todavía pega fuerte en el país, mientras que el control de los talleres y astilleros de la Luna convierten las buenas relaciones con la Serenísima en la base de cualquier nueva aventura espacial.
LA UNIÓN DE KALMAR
Los Reyes Vasa de Suecia gobiernan al fin antiguos sueños escandinavos de una única nación norteña, que desde los tiempos de Harald Haardrade se planteaba como una necesidad natural. La unión de Noruega, Dinamarca y Suecia ha convertido una región estancada en una pujante potencia militar, naval y colonial, y desde que Gustavo II Adolfo impusiera el control de Suecia sobre el total de la coalición, esta no ha perdido empuje, siendo capaz de hacer frente a cualquiera de las potencias europeas. A pesar de las naturales alianzas con el Imperio Británico, representa también una constante amenaza para este y su eficiencia organizativa ha demostrado ser una baza importante. Su flota espacial es peculiar debido a sus características, sólo poseen un navío de combate, pero este es el más enorme jamás diseñado o puesto en el espacio, se trata del Vasa, un astrobuque de 18800 pies de eslora.
EL PRINCIPADO DE ZWEIHENHELT
El príncipe Adelbert, primero de su nombre, gobierna este pequeño principado centroeuropeo a caballo entre la Confederación Helvética, el Imperio Alemán y el Imperio Austro-Húngaro. Con una población de unos setecientos u ochocientos habitantes (y unos cuantos caballos) y una extensión de menos de cuarenta y cinco hectáreas, se trata probablemente de la nación más pequeña del planeta. Sin embargo, es un país de gran riqueza debido a las numerosas entradas de divisas extranjeras, la ausencia virtual de impuestos y las ventajas fiscales que ofrece el Banco del Principado han atraído a algunas de las mayores fortunas del continente. Es también conocido por ser la patria del equipo que ha ganado la Champion Cup de polo en los últimos siete años.
EL IMPERIO OTOMANO
El Imperio Otomano sigue siendo un misterio para la mayoría de los ciudadanos de Occidente. Una sociedad decadente y - se susurra - incluso depravadamente cruel. Los escasos informes que atraviesan la gruesa e impermeable piel de los salones palaciegos otomanos hablan de un sultán que rige las vidas de sus súbditos al compás de sus caprichos y de una clase nobiliaria que se entrelaza en una enorme y compleja red de favores, de una vastedad que volvería loco al analista político más sagaz. Por lo que se sabe, el sistema de vasallaje se mantiene en las relaciones entre el pueblo y sus dirigentes, pero poco más. El Ogro, como llaman los líderes políticos occidentales al Sultán, mantiene a su nación en un conveniente segundo plano.
|