Las Cortes: El Verano

Cada impresión, cada emoción forma la memoria del mundo. Cada monólogo es una puerta y cada olor una señal de aquello que vive y nace.

Hoy ha crecido mucho el trigo, están los campos en mediodía. Doble lámpara de sol y cereal. El verano pone su color tranquilo sobre todas las cosas y de nuevo alborota el viento las hojas.

La laguna empieza a emerger de las sombras. Es un espectáculo de brillo y diversidad, de animales y  vegetación.

La luz rebota en el musgo y las ramas y relampaguea en un fulgor verde.

De las hojas de los grandes árboles se descuelgan y caen en la laguna las gotas del rocío de la madrugada.  Es uno entre muchos hermosos veranos, cuando el polvo se alza y danza y el cielo es un follaje azul, distante.

Y entonces fue cuando vino, con las brisas que se levantan de los arroyos y de sus conchas. Cuando sentía el latir de la tierra cantaba la canción del verano, la canción de yerbas secas y aromáticas que arrullaban como un sueño de pólenes y estrellas, que resbalan tibias por la piel y las manos. ¿Recordáis ese calor que templa los huesos?

En sus ojos parecía brillar todo un universo, reflejando la grandeza de lo que escondía. Su mirada era triste y misteriosa, y destacaba como una aurora mística, como si nunca fuera a ser conocido del todo por nadie, como si llevase consigo secretos que nadie sería capaz de descubrir.

Viejo entre los jóvenes y joven entre los viejos, sin edad ni tiempo, sólo una mente que rebosa energía. Como peregrino acude a todos los lugares que existen en busca del saber más profundo. Visita las puertas de mortales e inmortales, y encuentra los lugares más escondidos para descubrir aquello que de sí mismo aún no ha visto.

Como la lluvia, aparece de repente sin que nadie le sienta, como pájaros que libres vuelan en el cielo. No se puede encarcelar su alma porque es como el viento, no existe barrera ni obstáculo que su espíritu detenga.

Heredero de viejos ritos, descendiente de una dinastía de la que pocos quedan, hijo de los muchos que ya no están y que no debieron haber partido tan pronto.

Ese es Verano.


verano
 
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